El día más duro para Zapatero

Don Juan Carlos y Don Felipe presiden el acto.

El día del Desfile de la Fiesta Nacional es esperado por muchos. En él se pueden ver toda la parafernalia militar, se puede apreciar a la familia real presidiendo el acto y a los políticos que gobiernan para animarlos o abuchearlos. Esto último es lo que le sucedió a José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente fue recibido y abucheado con el grito de "¡fuera!" y “¡Zapatero dimisión!”. No es la primera vez que Zapatero es silbado durante la Fiesta Nacional, así que lo ha recibido con calma. Zapatero ha comentado que los abucheos son "un clásico”. Este recibimiento solo era el preludio de un día complicado.

Zapatero al bajar del coche oficial, se encontró cara a cara con Gallardón, que anteriormente le había criticado por la refinanciación de la deuda. "¿Cómo es que has estado tan nervioso en los últimos días que me has llamado mentiroso y envidioso?", le pregunta Zapatero. Gallardón entonces le invita a que lea el diario de sesiones del Senado y compruebe que había mentido al decir que Madrid pretendía aumentar su deuda, que ya asciende a 7.145 millones de euros. "Aquí hay un problema, el PP tiene un problema y tú tienes un problema. Decís una cosa y la contraria. Me pedís más ajustes y recortes y a la vez me pedís más gasto", le replicó Zapatero al alcalde. "No. Yo no quiero más deuda. Puedo garantizar que no me voy a endeudar más. Llevo un ajuste este año de 300 millones de euros. Yo lo que quiero es poder refinanciarla. Quiero lo que tienen las comunidades autónomas", reiteró Gallardón. Ante la incorporación de otros políticos a la discusión y la posible subida de tono de la misma, los reyes median en el conflicto. Éste termina con la petición de Gallardón a Zapatero, con la autorización del presidente, de enviarle un plan financiero para que autorice la refinanciación de 257 millones de euros que le vencen este año.





Zapatero y Gallardón en plena discusión.

La Fiesta Nacional contó con una incidencia, que fue la ausencia de la bandera de Venezuela. Desde Caracas se justifica el plante porque su abanderado sufrió una indisposición. El Paseo de la Castellana también vio como  la bandera de EE UU ha vuelto a participar, ya que la última vez que lo hizo fue en 2003, cuando desfiló junto a la de otros países que habían intervenido en la guerra de Irak. El entonces líder de la oposición, José Luis Rodríguez Zapatero, no se levantó ante el paso de la bandera estadounidense como muestra de su postura contraria a la guerra.

El desfile rindió homenaje a las misiones internacionales, así como a los soldados que dan y han dado su vida por España. La Fiesta Nacional también se ha visto afectada por la crisis. El Ministerio de Defensa ha reducido la presencia de unos 800 militares aunque desfilaron más de 3.000 soldados por las calles de Madrid. La Legión volvió a ser la preferida de los asistentes, “liderada” por el carnero Manolo. También tuvieron especial interés la UME, los paracaidistas y los regulares.

Fuentes: Retrasmisión en TVE, ABC, El País